El trastorno obsesivo compulsivo (TOC) es una alteración mental que se caracteriza por la presencia de obsesiones y compulsiones. Las obsesiones son las ideas o contenidos intrusivos que la persona experimenta como extraños o inaceptables y las compulsiones son los comportamientos que se realizan con el objetivo de eliminar dichas obsesiones.
Las obsesiones en el TOC pueden ser muy variadas pero existen una serie de temas que los pacientes manifiestan con más frecuencia que otros. En este artículo vamos a hacer un repaso de las obsesiones más frecuentes que suelen darse en el trastorno obsesivo compulsivo.
Obsesiones más frecuentes en el trastorno obsesivo compulsivo
TOC de amores
En el conocido TOC de amores, las obsesiones de la persona están relacionadas con la duda de si realmente quiere lo suficiente a su pareja. Se trata de un problema relacionado con la «duda patológica».
La persona que sufre este problema no puede dejar de comparar su relación de pareja con otras relaciones o incluso con películas o canciones en un intento de resolver su duda. Sin embargo, paradójicamente, cuanto más esfuerzo invierte en resolver esta duda, mayor es su malestar y alejamiento de su pareja.
Algunas personas acaban rompiendo con su pareja como una salida equivocada a su malestar.
TOC de orientación sexual
En este tipo de TOC, la persona tienes obsesiones frecuentes y recurrentes sobre su propia orientación sexual. Por lo general la persona con este tipo de obsesiones ha disfrutado de relaciones heterosexuales a lo largo de toda su vida, sin embargo en un momento puntual puede surgir un pensamiento indeseado que le lleve a cuestionar su propia sexualidad.
A lo largo del día tenemos multitud de pensamientos que pasan por nuestra cabeza y no les prestamos atención. Si la persona deja pasar ese pensamiento y «no lo compra» es prácticamente imposible que se genere una obsesión. Sin embargo si por alguna razón le presta más atención de la debida y comienza a cuestionarse su orientación sexual de forma seria, ahí nace el germen de la obsesión.
Aunque son más frecuentes las obsesiones relacionadas con ser homosexual, también puede darse el caso contrario, es decir, una persona abiertamente declarada homosexual que en determinado momento comienza a sentir temor a ser heterosexual.
Como podemos observar, en ambos casos se produce un pensamiento «egodistónico», es decir, un pensamiento que no está en sintonía con sus valores ni con la imagen que tiene de sí mismo.
TOC de contaminación
Las obsesiones relacionadas con la contaminación son uno de los grandes clásicos dentro del trastorno obsesivo compulsivo. La compulsión de lavarse las manos para aplacar las obsesiones ha sido ejemplificada en multitud de películas y probablemente sea una de las más conocidas.
Miedo a estar enfermo
El temor a estar enfermo o infectado de algo está muy relacionado con las obsesiones de contaminación. Sin embargo aquí las compulsiones adquieren la forma de visitas constantes al hospital o la realización frecuente de analíticas de sangre para descartar posibles enfermedades.
Normalmente las enfermedades a las que más se teme son aquellas que no manifiestan síntomas hasta estadios avanzados, como pueden ser determinados tipos de cáncer o el virus del sida.
Impulso de dañar a otros
Algunas personas pueden desarrollar un miedo irracional a «perder la cabeza» en un momento determinado y dañar a sus seres queridos. Este daño puede ser realizado mediante el uso de algún objeto o herramienta, como unas tijeras o un martillo hasta un posible envenenamiento accidental.
La compulsión más frecuente consiste en esconder y mantener fuera del alcance de la vista cualquiera de estas herramientas. Algunas personas buscan perfiles criminales en internet de individuos que hayan cometido estos actos y se comparan con ellos en un intento de consuelo.
Obsesiones de simetría y orden
Otro de los grandes clásicos en el TOC son las obsesiones relacionadas con el orden y la simetría. La persona que manifiesta este problema necesita disponer las cosas de acuerdo a un determinado patrón de simetría u orden (tamaño, forma, color, etc.) de lo contrario su malestar se dispara.
La compulsión en este caso está clara: ordenarlo todo de acuerdo a su obsesión.
Obsesiones de comprobación
Tanto el componente de duda patológica como el de comprobación se encuentran implícitos de alguna forma en cualquier tipo de TOC. Sin embargo existe una obsesión de comprobación más pura relacionada con la necesidad de verificar si se han realizado determinadas acciones como haber cerrado la puerta de casa, haber apagado el fuego o haber llamado a determinada persona.
Las compulsiones consisten en volver a realizar la acción varias veces con el fin de hacer desaparecer la obsesión. En los casos más graves el tiempo dedicado cada día a realizar estas compulsiones es tan elevado que la persona decide buscar ayuda profesional.
Es posible que lleves tiempo viviendo con alguna de estas obsesiones y eso no te haya impedido seguir viviendo tu vida de manera habitual. Sin embargo si sientes que tu vida poco a poco comienza a limitarse cada vez más por alguna de estas obsesiones, juntos podemos ayudarte a encontrar la solución.